
Recuerdas tu herida?, la que te hiciste corriendo en la banqueta delante de la casa...
Te comentaba que habías llorado mucho, que te habías sentido muy mal pero, al ponerte la venda todo había pasado, ahora solamente veías que tu mano se parecía a la de Jeff Hardy...
Y así fue, durante 3 días seguidos usaste la venda, te bañabas y le pedías a tu abuela que te la volviera a poner, así día tras día; ¿lavarla? claro que no!, como ibas a perder horas sin tu venda al estilo Jef Hardy.
Esta foto lo representa todo, la alegría con la que usabas la venda, la herida ya no existía, era solo un insignificante raspón que no te causaba el mayor daño, sin embargo habías ganado que tu mano se parecía a la del luchador que tanto admiras...
Ojalá te guste la foto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario